Estudió el grado de Ingeniería Electrónica en la Facultad de Físicas de la Universidad Complutense de Madrid, atesora varios másters y ahora vive en Nottingham (Reino Unido), donde a sus 26 años el cacereño José Pedro Manzano Patrón se encuentra en una de las cunas mundiales de la investigación cerebral. El joven está realizando un doctorado en el Sir Peter Mansfield Imaging Centre de la University of Nottingham, toda una referencia de la imagen por resonancia magnética nuclear, por el que Peter Mansfield recibió el premio Nobel. «¡Aún hay gente de su equipo trabajando en mis laboratorios!», dice José Pedro al otro lado del teléfono.
«Esto me ha abierto las puertas a trabajar con investigadores de primer nivel, como mis supervisores Stam Sotiropoulos o Theodore Kypraios, e involucrarme en proyectos de referencia internacional, como el UK Biobank o el Human Connectome Project. Es un privilegio estar aquí», confiesa.
Su tesis se centra en el estudio de las conexiones cerebrales mediante imágenes de resonancia magnética. A través de campos electromagnéticos, estos escáneres tienen la capacidad de ofrecer imágenes donde las distintas partes del cerebro aparecen con diferentes niveles de intensidad (contrastes), debido a sus variadas propiedades magnéticas.
«Usando esta información, aplico métodos de Machine Learning, como redes neuronales artificiales, y estadística Bayesiana para tratar de inferir y aprender cómo y con qué está conectada cada parte del cerebro, cómo influyen estas conexiones en su función y un sin fin de preguntas de las que aún desconocemos las respuestas. El objetivo final de mi tesis es generar nuevas herramientas de análisis que ayuden a otros investigadores a buscar respuestas para estas incógnitas, así como para aplicarlas en la práctica clínica en nuevas técnicas de diagnóstico para enfermedades como el Alzheimer o la Esclerosis Múltiple».
El cacereño es miembro del comité de Política Científica de la Sociedad de Científicos Españoles en Reino Unido y, recientemente, se uníó a la iniciativa Talento para el Futuro, ayudando en la elaboración de un pacto intergeneracional en las áreas de Innovación, Digitalización, Educación Superior y colaborando con otros grupos sobre el porvenir del empleo y el emprendimiento.
«Se trata de una de las sociedades más grandes y consolidadas de científicos españoles en el exterior. «Actualmente, somos mas de 700 miembros y llevamos a cabo actividades de divulgación científica, becas de movilidad, relaciones internacionales, etcétera», señala.
El país tiene uno de los mejores sistemas de universidades e investigación del mundo. Tras varios años, ha forjado muy buenas relaciones con instituciones como el Parliamentary Office of Science & Technology, órgano que se encarga de asesorar al Parlamento británico para mejorar su toma de decisiones. «En este momento se está impulsando la creación de una oficina similar en España, ya que somos de los pocos países europeos que no la tiene. Nuestro objetivo no es otro que transferir aquello que hemos aprendido aquí y creemos que podría contribuir al sistema español de Ciencia y Tecnología», apunta.
Covid y Brexit
Desde un plano más personal y ante la pregunta de cómo está viviendo el coronavirus, responde: «Sinceramente, soy un afortunado. No he tenido ningún caso grave cercano y, dado que mi principal herramienta de trabajo es un ordenador y mi financiación proviene de una beca de tres años, he podido seguir desarrollando mi estudio sin ningún inconveniente, mas allá de las restricciones y la reducida vida social».
Sin embargo, cree que ha sido un punto de inflexión que ha hecho replantearnos muchas cosas. «Este virus nos ha ayudado a comprender que el mundo jamás había estado tan interconectado, para bien y para mal», subraya.
En cuanto al Brexit, asegura que «se vive con la misma incertidumbre o más que la covid-19. Como hemos presentado recientemente en la ponencia sobre el Brexit en el Congreso, las encuestas que hemos llevado a cabo han mostrado repercusiones negativas respecto a la atracción de fondos y talento. Dada esta incertidumbre generalizada, de no saber qué pasará en cuanto a políticas migratorias y económicas, la gente prefiere irse a estudiar o trabajar a otros países europeos, como Alemania, donde la situación es mas estable y también ofrecen buena calidad en cuanto a universidades e investigación».
Desde tierras británicas destaca que echa de menos Cáceres y Extremadura y mira con nostalgia sus clases en el Francisco Pizarro y el Hernández Pacheco, sus partidos de baloncesto y su afición a la música con su paso por el grupo La H Suena.
Fuente: El periódico extremadura